Lanzado en 2009, WhastApp ganó fuerza en Brasil a mediados de 2012 y desde entonces el número de usuarios ha aumentado cada vez más. Actualmente, varias empresas ya están utilizando la aplicación para intercambiar mensajes con clientes y proveedores, y en el área de la salud no podría ser diferente.
Del mismo modo que Skype reemplazó las llamadas telefónicas, el intercambio de mensajes por SMS se ha vuelto obsoleto con la popularización de WhatsApp. Además, con la aplicación también es posible enviar mensajes de voz y hacer llamadas sin costo. Pero, después de todo, ¿está bien o mal usar WhatsApp para comunicarse con los pacientes? La respuesta es: depende del propósito.
En las clínicas, WhatsApp puede ser extremadamente importante ya que acelera el trabajo en la recepción. A muchas personas no les gusta hablar por teléfono o incluso esperar en los centros de llamadas, por lo que el paciente puede sentirse más cómodo para programar una cita enviando un mensaje a través de la aplicación.
Aún en relación con la recepción de la clínica, WhatsApp también se puede utilizar para confirmar citas. En el software médico Ninsaúde Apolo, por ejemplo, hay una función en la que se envían mensajes con un enlace a través del cual el paciente puede responder si asistirá a la consulta o no, y desde su respuesta, el estado se actualiza automáticamente en la agenda.
Además, la aplicación se puede utilizar para otros fines, como información y noticias sobre la clínica, felicitaciones de cumpleaños, mensajes navideños, entre otros.
WhatsApp en la relación médico x paciente
En Brasil, alrededor del 87% de los médicos usan WhatsApp para comunicarse con sus pacientes, lo que según el Consejo de Medicina no es una práctica prohibida, siempre que se use correctamente. Antes de la llegada de la aplicación, muchos profesionales de la salud ya se comunicaban con los pacientes a través de mensajes SMS e incluso por llamadas telefónicas, especialmente en el caso de los pediatras.
De hecho, esta práctica puede mantener el vínculo entre el médico y el paciente y establecer una relación de cercanía y confianza, sin embargo, enviar mensajes a través de la aplicación crea una situación de emergencia donde existe la posibilidad de que el paciente no entienda que el médico no siempre estará disponible para responder en el acto, además del hecho de que cierta información debe pasarse solo en persona.
Otro punto a destacar es la invasión de la privacidad que puede ocurrir en ciertos casos. Por lo tanto, lo más correcto es tener un número solo para establecer contacto con el paciente, privando a su número particular de posibles situaciones que puedan ocurrir, como, por ejemplo, llamadas durante horas o fines de semana inadecuados, e incluso enviar cadenas de mensajes.
Cuando acepte establecer contacto con los pacientes a través de WhatsApp, deje en claro que no estará disponible a tiempo completo y que la aplicación solo debe usarse para responder preguntas específicas, ya que parte de la información puede perderse o confundirse durante la conversación a distancia.